En el Evangelio de hoy, Jesús habla a sus discípulos sobre el juicio final. Él describe cómo vendrá en su gloria y separará a las personas en dos grupos: las ovejas a su derecha y las cabras a su izquierda. A los justos, les dirá que hereden el reino preparado para ellos, ya que los ayudaron cuando tuvieron hambre, sed, estaban enfermos o en la cárcel. Pero a los que no lo hicieron, los enviará al castigo eterno. Jesús enfatiza que lo que hagamos por los más pequeños, lo hacemos por Él.