Roma, Italia. El 13 de mayo de 1981, en medio de una multitud de 20.000 personas congregadas en la plaza de San Pedro, un joven turco llamado Mehmet Ali Agca dispara contra el Papa Juan Pablo II, hiriéndole de gravedad. Las sospechas apuntaron a la Unión Soviética, preocupada por la influencia que el Papa podía tener en su país natal, Polonia, en plena revuelta del sindicato "Solidaridad".